Cada vez son más las empresas de despedidas de soltera y soltero que buscan desafiar a los novios y ponerlos ante desafíos cada vez más extremos.
No por eso tienen que ser peligrosos, al contrario resultan de lo más divertidos para todos.
Y uno de esos juegos es el ya más que famoso paintball. La batalla entre equipos donde se simula una escenario de guerra y donde solo tú con tu arma marcadora sois los protagonistas.
Se trata de un juego en el que dos equipos luchan por eliminar a los adversarios del otro y así conquistar el territorio. Un divertido juego de estrategia donde todos los miembros de la despedida participan.
Dentro del ambiente se pueden desarrollar diferentes tipos de juegos, en lo cuáles en muchos tengamos que eliminar como objetivo principal al novio/a, o conseguir eliminar al portador de la bandera y trasladar ésta hasta el propio territorio.
El paintball resulta ser un juego muy apetecible para todos en una despedida ya que además de hacer que descarguemos adrenalina, nos ayuda a compenetrarnos mejor con nuestros compañeros y a crear lazos de equipo una vez estamos dentro de la partida, ya que unos cubrirán a otros y viceversa.
Una actividad donde en todo momento uno puede sentirse seguro, dado que está cubierto por chalecos pectorales, mono protector, guantes para manos y máscara. Un equipamiento seguro para la buena práctica del paintball.
Una actividad muy extendida por todo el mundo ya contando con varios millones de usuarios. Sobre las estadísticas para despedidas en España, de cada 100 despedidas realizadas en un entorno rural, 54 contratan la actividad del paintball para desarrollar y sorprender a sus homenajeados/as.
Podemos decir que se trata de la guerra más divertida y amistosa de cuántas conocemos y llegamos a realizar, donde además de intentar conseguir la victoria en la partida, hará sentirnos como auténticos soldados una vez dentro del campo de batalla. Y por supuesto las risas están aseguradas dentro y fuera del escenario de guerra.
Sin duda una opción para tener en cuenta a la hora de organizar una despedida de soltera y “disparar” sobre los novios la sorpresa y la diversión.
